Aspiración
Definición RAE
1. Acción y efecto de aspirar (atraer el aire a los pulmones). 2. Acción y efecto de pretender o desear algún empleo, dignidad u otra cosa. 3. Rel. En la teología mística, afecto encendido del alma hacia Dios. |
El vocablo latino aspiratio llegó al castellano como aspiración. Así se denomina al acto y la consecuencia de aspirar, un verbo con varias acepciones: puede referirse a ingresar aire a los pulmones o a pretender conseguir algo, por mencionar dos significados.
Aspirar a lograr una cosa, en este marco, supone tener la intención, la voluntad o la ambición de alcanzarla. Es una emoción poderosa y universal que reside dentro de cada uno de nosotros. Aspirar a tener amor, éxito o plenitud nos impulsa a luchar por algo más grande. Desde un punto de vista psicológico, alimenta nuestra motivación para perseguir nuestros sueños.
Cuando nos permitimos reconocer y abrazar nuestras aspiraciones, nos abrimos a nuevas posibilidades y oportunidades. Estas aspiraciones nos sirven como catalizador del cambio, empujándonos a explorar territorios inexplorados y embarcarnos en aventuras que de otro modo nunca hubiéramos considerado. Al atender el llamado de nuestras aspiraciones, nos embarcamos en un camino de autodescubrimiento, donde descubrimos talentos y fortalezas que han estado latentes dentro de nosotros.
Cuando nos negamos la oportunidad de perseguir nuestras aspiraciones, podemos experimentar sentimientos de frustración, insatisfacción e incluso resentimiento. Corremos el riesgo de caer en un estado de estancamiento, en el que nos volvemos complacientes y nos conformamos con una vida que es menos de lo que realmente deseamos.
Beneficios de las aspiraciones
- Tener aspiraciones nos ayuda a fijarnos metas personales.
- Implica tener el deseo de crecer, mejorar y alcanzar nuestro máximo potencial, lo que nos lleva a trabajar duro y esforzarnos por tener más conocimientos y más habilidades.
- En lugar de estancarnos en nuestra satisfacción, las aspiraciones nos impulsan a buscar nuevas experiencias, aprender y evolucionar continuamente.
- Perseguir nuestras aspiraciones a menudo implica salir de nuestra zona de confort y asumir riesgos. Puede requerir que enfrentemos la incertidumbre, aceptemos la incomodidad e incluso experimentemos fracasos en el camino, que deben ser tomados como una oportunidad de crecimiento y resiliencia. Es mejor intentarlo y fracasar que no haberlo intentado nunca.
- Rodearnos de personas con ideas afines y aspiraciones similares puede brindarnos aliento, inspiración y conocimientos valiosos.