Inclusión digital

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La inclusión digital es la democratización del acceso a las [ https://es.wikipedia.org/wiki/Tecnolog%C3%ADas_de_informaci%C3%B3n_y_comunicaci%C3%B3n tecnologías de la información y la comunicación] para permitir la inserción de todos en la sociedad de la información. La inclusión digital es también la rutina diaria para maximizar el tiempo y sus posibilidades. Un incluido digital no es aquel que solamente usa el nuevo lenguaje para intercambiar mails, sino el que usufructúa este soporte para mejorar sus condiciones de vida y puede tener una postura crítica frente a los criterios que definen las tecnologías como una panacea social.

Para que suceda la inclusión digital, se precisa de tres instrumentos básicos:

• una computadora o teléfono inteligente

• acceso a la red

• dominio de esas herramientas.

Por lo tanto, no basta que las personas tengan una simple computadora conectada a Internet para considerar están incluidas digitalmente, se precisa saber qué hacer con estas tecnologías.

Entre las estrategias inclusivas hay proyectos y acciones que facilitan el acceso de personas con bajos ingresos a las tecnologías de información y comunicación (TIC). La inclusión digital también está dirigida hacia el desarrollo de tecnologías que extienden la accesibilidad para usuarios con discapacidades.

De esta forma, toda la sociedad puede tener acceso a la información disponible en Internet, y así producir y diseminar el conocimiento. La inclusión digital está insertada en el más grande movimiento de la inclusión e integración social, uno de los grandes objetivos compartidos por diversos gobiernos alrededor del mundo de las últimas décadas.

Tres nuevos conceptos son incorporados a las políticas de inclusión digital:

• la accesibilidad a todas las TIC (e-accesibilidad), en este caso, no solamente la población con discapacidad;

• la competencia de usar las tecnologías en la sociedad de la información (e-competencias)y

• la inclusión digital genuina, que intenta captar aquellas situaciones en las que las nuevas tecnologías son incorporadas a las prácticas de la enseñanza, emulando las relaciones de la tecnología con el campo disciplinar.

El movimiento de inclusión digital

En la primera Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información (CMSI - WSIS) organizada por la Unión Internacional de Telecomunicaciones en el año 2003, la sociedad civil estuvo representada junto a los gobiernos y el sector privado, y defendió la necesidad de estimular no sólo el acceso, sino también el uso y la apropiación de las nuevas tecnologías porque sostienen que éstas efectivamente puedan incidir en los propios procesos de desarrollo, combatiendo las demás brechas que subyacen a la digital.

Las TICs deberían proporcionar un espacio de encuentro de una nueva esfera pública, donde la sociedad civil pueda definirse y comprenderse en su diversidad, y donde las estructuras políticas estén sujetas al debate público y sean evaluadas por sus acciones, garantizando la participación de las categorías más excluidas a través de perspectivas de género, regionales y sociales.

En ocasión de WSIS/CMSI, los principales grupos de la sociedad civil enfatizaron el rol de las nuevas tecnologías como herramientas de comunicación de valores comunes entre grupos, individuos y organizaciones sociales. Desde ese punto de vista, la inclusión digital debe ser pensada como un asunto colectivo, no individual, donde los beneficios sociales hay que verlos en relación a los que se generan para las comunidades, organizaciones, familias y grupos que sacan provecho de las tecnologías, aunque no tengan acceso a éstas.

La eficacia de las políticas de inclusión digital dependerá de las posibilidades de integración del conocimiento de sus beneficiarios, considerando que no existe un solo modelo, sino muchas posibles sociedades de la información y de la comunicación adaptadas según las diferentes necesidades y objetivos individuales y comunes de un planeta para nada homogéneo.

OLP: Una Laptop por Chico (igualdad de acceso a las tecnologías)

En enero de 2005, el Media Lab del MIT lanzó el proyecto de investigación para desarrollar una laptop de USD 100: una tecnología capaz de revolucionar la forma en que se educaba a los chicos a nivel mundial. Para lograr este objetivo se creó una nueva organización sin fines de lucro, One Laptop per Child (OLPC, Una Laptop por Chico), independiente del instituto.

“Es un proyecto educativo, no un proyecto de laptops”, explicó Nicholas Negroponte, quien llevó adelante esta iniciativa cuyo objetivo es proveer a los chicos del mundo la oportunidad de explorar, experimentar y expresarse.

One Laptop per Child (Una Laptop por Chico) es un concepto. Sus creadores explicaron que puede ser llevado a cabo de más de una forma, y bajo ningún concepto está limitado a la realización conocida como "la laptop de USD 100" de la organización sin fines de lucro OLPC.

La motivación de la OLPC es simple: muchos chicos –particularmente en las zonas rurales de los países en vías de desarrollo– tienen un acceso tan limitado a la escuela (en algunos casos solamente la sombra de un árbol) que construir escuelas y preparar maestros es sólo una manera, quizás la más lenta, de solucionar el problema. Si bien el proceso de construcción de escuelas y la capacitación de maestros no deben ser eliminados, hay otras alternativas para desarrollar en paralelo, sugeridas por la OLPC. Por ejemplo: basarse en los chicos e involucrarlos directamente en su propio proceso de aprendizaje.

“Quizás suene imposible el equipar a los chicos más pobres con laptops conectadas cuando los chicos más ricos no las tienen, pero no es así. Las laptops pueden ser asequibles y los chicos son mucho más capaces de lo que solemos creer”, afirman.

A la pregunta de por qué consideran que necesitan laptops los chicos de los países en vías de desarrollo, responden que “las laptops son tanto una ventana como una herramienta: una ventana al mundo y una herramienta para pensar. Son una forma maravillosa para que todos los chicos puedan aprender a través de la interacción y la exploración.”

Aprender a aprender

La meta del proyecto es el aprendizaje y no la alfabetización digital, dado que, explican, ella es un sub-producto de la fluidez que obtendrán los chicos de su aprendizaje digital. Los chicos –particularmente los más chicos– no necesitan aprender sobre IT y definitivamente no necesitan ser ávidos usuarios de Word, Excel y PowerPoint (porque no son oficinistas). Sin embargo, adquirir estas habilidades, creciendo junto a una laptop, será fácil. Aprender cosas que tienen significado mientras se construye el conocimiento, especialmente cuando los chicos se dan cuenta que tuvieron que ir mas allá de lo que se creían capaces de hacer es natural y liberador.

Los chicos necesitan aprender a aprender, y esto proviene de la pasión que viene del acceso, la habilidad de hacer, de comunicar y expresarse.

Cerrando la brecha digital

El acceso a Internet y a las herramientas de expresión (texto, música, video, gráficos) son los “juguetes” educativos contemporáneos. Los chicos afortunados del mundo desarrollado tienen acceso a una computadora en sus hogares y usualmente a una propia, con música, DVD, junto a medios interactivos y ricos con los cuales pueden hacer cualquier cosa, desde aprender idiomas hasta jugar juegos.

El poder de acercar estos mismos recursos a los mil millones de chicos que actualmente no tienen dicho acceso, parecía ridículamente desalentador, pero ya no lo es. Esto es simplemente porque las laptops han mantenido y perpetuado un alto costo de manera artificial. Es justo decir que la OLPC ha roto este mito y que varias compañías han seguido sus pasos.

La intransigencia del problema educacional ante las soluciones convencionales, combinado con la pobreza y la necesidad de una educación de alta calidad de por vida para una inclusión integral en la economía global basada en el conocimiento, demanda nuevas formas de pensar. La misma tecnología digital que ha permitido un crecimiento sin precedentes del conocimiento, combinado con las nuevas metodologías educativas, pueden liberar la capacidad latente de aprendizaje de los chicos del mundo.

Los chicos pobres carecen de la oportunidad, no de la capacidad, de aprender. Proveyendo laptops gratuitas a los chicos, la OLP considera que les acerca las mismas oportunidades para aprender que las familias más pudientes les proveen a sus chicos.