El engranaje de las creencias
Por Alberto Levy*
La misión de la Alta Dirección consiste en traducir las decisiones políticas al lenguaje de la acción. Convertir intenciones en criterios que orienten y coordinen las decisiones rutinarias de ejecución. Para ello, lidera la transformación de la estrategia en planes operacionales y luego en programas de acción táctica sobre la plataforma de un fuerte Factor Lamed que implica alta cohesión grupal y compromiso individual.
El engranaje de las creencias es la Matriz Relacional que vincula a los miembros de un grupo, una organización, un equipo o hasta un país en las dimensiones de lo Emocional y de lo Racional que comparten, la cosmovisión, la idiosincrasia, el “modo de vivir” que surge de las ideas guía, de pedidos, promesas, ideas, valores, virtudes, hábitos, estilos y clima, de coordinar las diversas áreas de la organización y de tratar de generar una visión comprendida, compartida y comprometida.
Como vemos, nuestro enfoque de la Psicología Organizacional se focaliza en un “tejido” de perspectivas emocionales y racionales inseparables entre sí.
El CEO alza la bandera de hacer de la innovación un valor central de la cultura de su organización, basada en el aprendizaje y el conocimiento colectivo especialmente fomentando una cultura de “Descubrir” y de “Inventar”.
La consecuencia de este abordaje es que se desarrolle:
- Pensamiento Sistémico, como capacidad cultural de “comprender totalidades”, emergentes sistémicos, el bosque y no sólo el árbol. El modelo PENTA es un buen instrumento para desarrollar esta característica cultural.
- Capacidad de teorizar lo consideramos una característica cultural imprescindible ya que toda estrategia es una “teoría del negocio”. “Creemos que en estos segmentos de la sociedad vamos a lograr nuestros objetivos” es un planteo teórico.
- Valores trascendentes son “virtudes humanas” que están muy por encima de los “valores operacionales tales como “innovación” o “trabajo en equipo”. Por ejemplo, el respeto irrestricto por cada ser humano, amor, justicia, compasión, fortaleza, humildad, integridad, solidaridad y nobleza.
- Disposición ante el Conflicto.Actitud al enfrentar el nivel de rivalidad o de fricción competitiva versus otras organizaciones competidoras.
- Abordaje de la complejidad. Muy relacionado con el pensamiento sistémico, es la capacidad cultural grupal de evitar la miopía estratégica de no detectar todas las variables que pueden impactar en un diagnóstico o en una selección de una opción estratégica, operacional o táctica.
- Liderazgo transformacional. El líder busca que la gente que lo sigue lo supere como modelo a seguir.
- Organicidad vertical y horizontal. Ruptura de muros que separan áreas y de losas que separan niveles. Disolución del “Síndrome Palomar”, de visiones-túnel, de compartimentos estancos.
- Innovación Proliferada. Cada miembro de la organización está involucrado en procesos de innovación. Por ejemplo, el de cómo mejorar su propia tarea o los procesos, proyectos y cambios en los que participa.
- Sustentabilidad Bidireccional. Nos importa lo ambiental, lo social, lo público y lo emocional, además de lo económico, no sólo por “actitud benevolente” sino también porque la mentalidad sistémica nos indica que su cuidado “reverbera” favorablemente hacia nosotros.
- Involucramiento Sistémico. Cada miembro de la organización está dispuesto a involucrarse y participar en la generación de iniciativas de mejora.
- Razonamiento prospectivo.Actitud grupal de inventar escenarios futuros verosímiles en lugar de vivir aferrados a la extrapolación de los hechos del pasado hacia el futuro como si nada cambiara del ayer.
- Actitud ante el riesgo. Para cada decisión, adoptar la actitud adecuada entre los extremos de propensión total al riesgo o de aversión total al riesgo.
- Balance Cambiar/Conservar. Cambiar cuando se debe cambiar. Conservar cuando se debe persistir.
*Levy/Revista de Investigación en Modelos Financieros – Año 9 Vol. I (2020-I). 55-93