Liderazgo redárquico
La redarquía es un modelo organizativo emergente característico de las nuevas redes abiertas de colaboración -muy especialmente la web- y está basado en las interacciones que múltiples agentes mantienen entre sí cuando comparten su talento y su conocimiento de forma abierta y transparente, en relaciones de igual a igual.
Frente al tradicional modelo organizativo jerárquico en el que las órdenes son impuestas y discurren exclusivamente de arriba abajo, la redarquía es un orden que funciona de abajo arriba: las decisiones y las soluciones emergen de forma natural como destilación espontánea de la inteligencia colectiva.
La redarquía establece un orden alternativo en las organizaciones, no necesariamente basado en la autoridad de la jerarquía formal, sino de las relaciones de participación y los flujos de actividad que surgen de forma natural en las redes de colaboración (José Cabrera, 2014).
El liderazgo redárquico es anclar el ejercicio del liderazgo en la red de relaciones de un equipo, en su tejido social y en sus formas de interacción. Esa red es la fuente desde donde emerge el desempeño extraordinario. No es ninguna persona en particular, sino las nuevas capacidades que brotan de las relaciones.
Aprender este giro de rol de los jefes es uno de los desafíos de este tiempo, pues ser un facilitador de la efectividad del equipo requiere otras miradas, valores y prácticas, más allá de las prácticas verticalistas centradas en el mando y control.
Implica crear el campo emocional y de propósito compartido para que las personas vuelquen voluntariamente su talento en el logro de las metas consensuadas.
Las investigaciones muestran que para que una redarquía sea efectiva tiene que ofrecer seguridad psicológica y confianza, claridad de propósito, metas y objetivos, y emociones predominantemente positivas.
Cuando se dan esas condiciones, los integrantes del equipo generan trascendencia, pertenencia y un compromiso con las metas organizacionales, y están dispuestos a poner sus talentos y su pasión al servicio del equipo.
Eso dispara la colaboración, la autoorganización y el empoderamiento, siendo el anclaje de los resultados sostenidos. El cómo redárquico aumenta exponencialmente la probabilidad de conseguir buenos resultados para la empresa y bienestar para los empleados.
Modelo del liderazgo redárquico
- El objetivo de la integración jerarquía-redarquía es crear organizaciones que combinen la exploración, la adaptabilidad, la agilidad y la capacidad de aprendizaje e inteligencia colectiva de las redarquías con la escalabilidad, los resultados y la eficiencia de las jerarquías.
- Un equipo redárquico entiende que el ejercicio del liderazgo es una capacidad colectiva y distribuida, donde cada integrante puede ser líder situacional de un contexto específico. El equipo redárquico es colaborativo y empoderado, con alto nivel de decisiones tácticas y operacionales, y autogestionado en su funcionamiento.
- Integrando menos jerarquía con más redarquía, una produce eficiencia y la otra colaboración radical e innovación disruptiva.
- Es clave crear seguridad psicológica, confianza y positividad sobre las cuales se articulan los propósitos y metas. En ese espacio de confianza y de relaciones horizontales, hay que darle poder al equipo de cara a sus clientes, donde el rol del jefe es articular al equipo, estar a su servicio y acompañar.
- El rol del jefe cambia significativamente desde dar instrucciones y controlar a ser un facilitador de condiciones.
- Promover la inteligencia colectiva y la innovación como fuente de creación de valor, se traduce en creación de nuevos productos y servicios que generan una ventaja competitiva inimitable, produciendo resultados sostenidos y bienestar en los empleados.
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